- HAZ SIEMPRE LO MEJOR Si siempre haces lo mejor que puedes, nunca te recriminarás ni te arrepentirás de nada.
- HONRA TUS PALABRAS Se coherente con lo que piensas y con lo que haces. Ser auténtico te hace respetable ante los demás y ante ti mismo.
- NO TE TOMES NADA PERSONAL. En la medida que alguien te quiere lastimar, ese alguien se lastima a si mismo y el problema es de él y no tuyo.
- NO SUPONGAS No des nada por supuesto. Si tienes dudas acláralas. Suponer te hace inventar historias increíbles que solo envenenantu alma y no tienen fundamento
Los cuatro acuerdos #Vida #Amor #Luz #Consciencia pic.twitter.com/wXUrouAAjg
— RAFA ORTIZ (@rafaortizse) December 29, 2017
Una guía práctica para la libertad personal
El conocimiento tolteca surge de la misma unidad esencial de la verdad de la que parten todas las tradiciones esotéricas sagradas del mundo. Aunque no es una religión, respeta a todos los maestros espirituales que han enseñado en la tierra, y si bien abraza el espíritu, resulta más preciso describirlo como una manera de vivir que se distingue por su fácil acceso a la felicidad y el amor.
El doctor Miguel Ruiz nos propone en este libro un sencillo procedimiento para eliminar todas aquellas creencias heredadas que nos limitan y substituirlas por otras que responden a nuestra realidad interior y nos conducen a la libertad.
Hace miles de años los toltecas eran conocidos en todo el sur de México como «mujeres y hombres de conocimiento». Los antropólogos han definido a los toltecas como una nación o una raza, pero de hecho, eran científicos y artistas que formaron una sociedad para estudiar y conservar el conocimiento espiritual y las prácticas de sus antepasados.
La conquista europea, unida a un agresivo abuso del poder personal por parte de algunos aprendices, hizo que los naguales se vieran forzados a esconder su sabiduría ancestral y a mantener su existencia en la oscuridad. Por fortuna, el conocimiento esotérico tolteca fue conservado y transmitido de una generación a otra por distintos linajes de naguales. Ahora, el doctor Miguel Ruiz, un nagual del linaje de los Guerreros del Águila, comparte con nosotros las profundas enseñanzas de los toltecas.
“No hay razón para sufrir. La única razón por la que sufres es porque tú así lo eliges. Si observas tu vida encontrarás muchas excusas para sufrir, pero ninguna razón válida. Lo mismo es aplicable a la felicidad. La única razón por la que eres feliz es por que tú decides ser feliz. La felicidad es una elección, como también lo es el sufrimiento.”